El Campo de Fútbol Xiprerets sería el escenario donde en la fría mañana del domingo se disputó lo que tendría que haber sido un gran duelo entre el Santa Pola y el Dolores, quinto y cuarto clasificados respectivamente.
Y decimos tendría porque el colegiado elegido para el encuentro se encargó, con sus decisiones que no contentaban a ninguno de los dos equipos, de deslucirlo al dejar al Santa Pola con nueve jugadores y al Dolores con diez.
La primera mitad cumplía las expectativas de lo que se esperaba que ocurriera: un Santa Pola empujando en ataque y un Dolores muy bien situado en defensa y lanzando peligrosos contraataques. Ambos conjuntos disfrutaban de ocasiones claras de gol que no lograban materializar.
Pero en el minuto 38 el colegiado cayó en la trampa que le supuso la segunda amarilla a Piñero, en una falta cometida por éste, que el jugador rival exageró en exceso, el árbitro interpretó que era merecedora de tarjeta. Esto obligó al Entrenador a introducir cambios que trastocaron por completo el planteamiento inicial.
A pesar de ello el equipo tiró de raza y contó con una clara ocasión de gol que los pudo llevar a vestuarios con ventaja en el marcador, al tiempo que sabía contener las embestidas del Dolores.
Pero lo mejor del árbitro se lo reservó para la segunda mitad, en la que el juego estuvo parado cerca de 10 minutos por decisión de éste, en un encuentro en el que no estaba pasando nada anormal. Para colmo, volvería a expulsar a dos jugadores, uno por cada equipo, lo que condicionó el desarrollo de este segundo acto, acabando el encuentro con empate sin goles, aunque con la sensación de un partido disputado de poder a poder.
El peor parado de este encuentro fue, sin duda, el Santa Pola, que se vio relegado a la octava posición y que no podrá contar para el próximo encuentro con dos jugadores importantes como son Piñero y Sigu, que vienen a sumarse a la ya sabida de Jhony por lesión.